La reducción a nivel mundial del precio de los medicamentos antirretrovirales (ARV) y otros avances en la última década, han transformado al VIH de ser una pandemia que representa una amenaza para la vida,  a una condición crónica manejable.  La adherencia al tratamiento antirretroviral (TAR) puede permitir a las personas que viven con el VIH (PVV) vivir con poco o ningún riesgo de transmitir el VIH, pero esto requiere que estos tengan acceso continuo a tratamiento asequible. Desde el 2015 el gobierno dominicano aprobó un presupuesto nacional para comprar suficientes ARV para sus PVV, pero no existe garantía de que los futuros gobiernos continúen priorizando la asignación suficiente de fondos a medida que más personas sean elegibles para tratamiento.

Con el objetivo de garantizar el financiamiento sostenible para el TAR, el gobierno dominicano se comprometió en el Plan Estratégico Nacional 2015-2018, a cubrir el TAR dentro del esquema del Seguro de Salud Familiar (SFS). Esto garantizaría que las contribuciones regulares a la Seguridad Social de los empleados, empleadores y el Gobierno, se puedan utilizar para financiar un tratamiento asequible para la población afiliada durante el tiempo que sea necesario. El Consejo Nacional para el VIH y el SIDA (CONAVIHSIDA) y la Superintendencia de Salud y Riesgos Laborales (SISALRIL) fueron encargados de implementar esta directiva, pero enfrentaron un desafío: los ARV se compran internacionalmente en un pedido anual para reducir costos, y el diseño descentralizado del SFS no cubre medicamentos o suministros comprados centralmente a proveedores extranjeros.

Para abordar este tema, el Proyecto de Financiamiento y Gobernanza de Salud (HFG) de USAID brindó asistencia técnica a CONAVIHSIDA y la SISALRIL, para desarrollar un modelo operacional que identifique las reformas institucionales necesarias para permitir que los ARV sean financiados a través del SFS, mientras todavía se adquieren centralmente por el Gobierno a nivel internacional y se delinean los pasos necesarios para implementar el modelo. HFG preparó el modelo propuesto para su revisión y consideración por parte del Ministro de Salud Pública y el Consejo Nacional de Seguridad Social

Además, en preparación para la inclusión de los antirretrovirales en el esquema de la Seguridad Social, evaluamos los sistemas actuales para la compra, el almacenamiento y la distribución de los ARV e identificamos las leyes y normativas que requieren modificaciones. A través de este apoyo se identificaron más de US $ 160,000 en ahorros potenciales de costos anuales, que podrían ser logrados al transferir todas las responsabilidades de almacenamiento y distribución al sector público. Esto aumentaría a su vez los fondos disponibles para la adquisición de ARV y en última instancia, contribuiría a aumentar el acceso a los ARV y al logro de los objetivos 90-90-90.

Finalmente, HFG analizó los sistemas de información actuales que requerirían ser mejorados o modificados para facilitar la inclusión de ARV en el SFS. La guía que describe estos cambios propuestos identifica el software específico y los ajustes correspondientes necesarios para permitir a las Administradoras de Riesgos de Salud tanto públicas y privadas, monitorear los ARV adquiridos para sus miembros centralmente, al tiempo que protegen la información personal.

La inclusión de la TAR en el SFS, representaría un compromiso positivo por parte de la República Dominicana para garantizar la disponibilidad sostenida de TAR y con ello mejorar los medios de subsistencia de las personas que viven con el VIH. Las contribuciones de HFG a las reformas institucionales están ayudando a convertir este compromiso en acción y, además, a facilitar la expansión sostenible de la estrategia de Tratamiento para Todos. HFG continúa trabajando en la República Dominicana para afiliar en el SFS a las personas que viven con el VIH, para aprovechar esta fuente de financiamiento sostenible y protección financiera.